La energía; una herramienta útil que todos tenemos a nuestro alcance.
El Reiki es sencillamente una técnica para aprender a utilizarla.
Es un método que recupera la antiquísima tradición de la "imposición de manos" y la hace accesible a todos. Ya no hace falta tener un don, ser un curandero, un chamán o estar iluminado para transmitir sanación a través de nuestras manos.
¿Qué consigue?
La imposición de manos con el método Reiki provoca varios e incontables efectos: alivia el dolor, tranquiliza, mejora el ánimo, equilibra, calma... mejora la calidad del sueño, nos ayuda a encontrar soluciones, a clarificar las ideas.
La energía va allí donde hace falta, cada persona recibe en cada sesión aquello que necesita en el momento, sea o no lo que ella espera.
El Reiki nos permite a su vez sentirnos útiles; ayudando a los demás, a los niños, a los animales, a las plantas... y sobretodo, a nosotros mismos.
¿A quién puede interesar?
Cualquiera puede recibir una sesión de Reiki, (excepto personas que lleven un marcapasos).
Y cualquiera puede aprender a dar Reiki, no hace falta tener cualidades, ni es necesario creer en nada. Sólo estar abierto a experimentar.
Tampoco hay límite de edad.
Enseñanza:
se divide en 4 niveles.
Primer nivel:
para trabajar la parte física. Salud, dolores, síntomas, tranquilizar, dormir, etc,.
Segundo nivel:
para trabajar a distancia. Podemos enviar Reiki a personas que están en otra ciudad o país. También podemos trabajar situaciones: un examen, juicio, conflicto, relación, entrevista etc,.
Tercer nivel:
trabaja a nivel emocional y espiritual. Para sanar cosas antiguas, patrones, para limpiar energías no propias o de baja densidad.
Maestría:
aprender a iniciar a otras personas y a dar todos los cursos de formación de Reiki.
Todos los cursos tienen una duración de 2 sesiones de 4 horas aproximadamente y una de 2 horas unos 15 días después.
En todos los niveles entrego un libro con toda la información y un certificado de asistencia.
Mi experiencia:
Mi historia con el Reiki empezó en 2001, a través de la Asociación de Servicio Reiki.
Me costó aceptar que a través de mis manos podía transmitir energía, pero después de 11 años experimentándolo, dando y recibiendo energía, viendo resultados en los demás, en plantas, en animales, en mi ¡ya no me queda ninguna duda!.
En el 2004 obtuve la maestría en el Sistema Usui Shiki Ryoho (sistema Usui tradicional).
Des de entonces he iniciado a muchas personas. ¡Un placer!
Andreu me preguntó:
ResponderEliminarEsto del Reiki ¿es una cosa que puede hacer cualquiera? Imagino que no se requieren actitudes físicas especiales ni tampoco mentales, pero si ¿cierta predisposición, no? Para una persona muy profana en estos temas ¿también está a su alcance?
Yo respondí:
Cualquiera puede practicar Reiki. Piensa que hay quien inicia a niños. Yo inicié a mi madre cuando tenía 76 años, porque se rompió el pié y lo único que le quitaba el dolor era el Reiki, así que me pidió aprender, y a mi hermano, que no creía absolutamente en nada, pero se da reiki en sus rodillas cuando va en bus porque las tiene mal.
La disposición que necesitas es la misma que la de un padre que pone su mano en la barriguita de su hijo que se queja de la tripa y tranquiliza al niño, una intención de amor, de dar.
¡Espero que te sirva!
Aurora dijo:
ResponderEliminarPor si no te acuerdas de mí, la última vez que estuvimos juntas, fue haciendo una iniciación de Reiki a tres amigas mías.
Por cierto, estaban desesperadas, no tenían ningún sentido sus vidas, desde ese momento les cambió la vida.
Un abrazo